PRIMERO DE MAYO DÍA INTERNACIONAL DE LA CLASE OBRERA: INTERNACIONALISTA, COMBATIVO, UNIDO Y MASIVO

El Colectivo Nacional Sindical Clasista “Guillermo Marín” saluda a la clase trabajadora y al pueblo al conmemorarse un año más de las heroicas jornadas de los trabajadores de Chicago, en los Estados Unidos de Norte América, por la búsqueda del bienestar de los asalariados entre otros, de una jornada máxima laboral de 8 horas que tuvo como trágico desenlace la represión: encarcelamiento y posterior ejecución de los dirigentes más destacados de esa época.

El día internacional de la clase obrera, primero de mayo, su conmemoración es producto de un acuerdo del Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional del año 1889, caracterizándose por ser una jornada de lucha para no olvidar lo sucedido a los mártires de Chicago.

Que el espíritu que ha movido desde entonces la lucha y las exigencias de la clase trabajadora y del pueblo, sigue siendo el mismo hoy, lo cual nos obliga y compromete a trabajar día a día por la unidad, la organización y la lucha del movimiento obrero y en particular del movimiento sindical.

Este primero de mayo de 2010 se desarrolla en la más profunda crisis económica, política, social, ambiental, alimentaria y humanitaria que trae como consecuencia la afectación de la gran mayoría de los trabajadores y al pueblo, donde se ejecuta la política neoliberal envuelta en planes nacionales de desarrollos y leyes aprobadas por lacayos que son la gran mayoría de parlamentarios y senadores de la República de Colombia.

Con la aplicación en 8 años del “Estado Comunitario” con su columna vertebral la seguridad democrática del Presidente Álvaro Uribe Vélez, el neoliberalismo ha tenido patente de corso para que lo poco que existe de bienestar para el pueblo se vaya al piso. Se aumentan los precios de los alimentos y producto de la canasta familiar, el alto costo de la gasolina, la tercerización pulula en nuestro país, la zozobra de los trabadores provisionales vinculados es mayor por sus condiciones laborales flexibilizadas, la mercantilización y el negocio en que han convertido la salud y la educación conllevando que sea un servicio y no un derecho fundamental bajo la responsabilidad del estado colombiano; el proceso de privatización de las empresas del estado incluyendo las más rentables y estratégicas , amenaza de liquidación del SENA y el ICBF, la privatización de la educación superior con la no entrega del presupuesto para su marcha y viabilidad, el resquebrajamiento de las prestaciones sociales del pueblo trabajador: aumentando los requisitos y disminuyendo los beneficios de los trabajadores en Colombia; el paupérrimo reajuste del salario mínimo y del salario de los trabajadores estatales, la violación reiterada de los DDHH a los trabajadores expresados en el no reconocimiento del derecho de asociación y libertad sindical, la penalización y la criminalización de la protesta social, el recorte de los derechos democráticos y las libertades políticas y la violación y la entrega de la soberanía nacional.

Frente a la situación y condiciones materiales de existencia del pueblo colombiano y ante las amenazas que significan las políticas planteadas en la coyuntura electoral hacia la presidencia de la República de Colombia, tienen validez para el movimiento social y popular los eventos democráticos y sus conclusiones: Cumbre social y política de 2009, el programa político del PDA- ideario de unidad-, la plataforma de lucha del Movimiento por la Constituyente Popular –MCP-, que estamos por conquistar con la movilización y el aporte del movimiento sindical en ellas, un gobierno democrático, progresista, patriótico y popular, que transforme las condiciones de vida en nuestro país y contribuya a erradicar la corrupción, la politiquería y el clientelismo, que Colombia empiece hacer parte de los países que actúa con independencia del imperialismo especialmente del Norte Americano, que garantice los derechos democráticos, las libertades políticas, que el pueblo pueda ejercer su soberanía y la democracia popular.

Lo anterior no es posible lograrlo, sino colocamos al centro la movilización social y política como una de las herramientas fundamentales para los trabajadores organizados y no organizados podamos derrotar las medidas neoliberales, antisindicales, antidemocráticas.

Como Colectivo Sindical, invitamos a todas las organizaciones, movimientos, corrientes políticas y sindicales, que hacen parte del movimiento sindical en Colombia, a que sigamos contribuyendo a la construcción del movimiento de oposición al régimen y al gobierno. Debemos colocar al centro banderas que estén por la defensa y conquista de los derechos democráticos, las libertades políticas, por trabajo digno y en solidaridad con los sectores en conflicto: Salud, Magisterio, la USO, el Sindicato de la DRUMMONG, SINBIENESTAR , SINDESENA, entre otros.

Hacemos el llamado a todos los trabajadores y trabajadoras de la ciudad y del campo a que continúen organizándose en sindicatos, ya que es el instrumento que históricamente ha permitido que la clase trabajadora conquiste y defienda sus derechos e intereses.