1. La venta de un 10% adicional de ECOPETROL.
Nos sumamos a las voces de protesta de la Unión Sindical Obrera –USO- y a otros pronunciamientos de organizaciones sociales y populares por considerar que la venta adicional de un 10% de ECOPETROL atenta contra el patrimonio público y está en la vía de acabar con las empresas estatales estratégicas de Colombia, bajo argumentos de utilizar estos recursos para invertirlos en infraestructura vial y afrontar la crisis generada por el invierno.
Es claro para nosotros, que las medidas asumidas por el gobierno de Uribe de escindir a ECOPETROL la administración de las cuencas hidrocarburíferas de la Nación y posteriormente vender el 10.1% de su propiedad, donde convierte la empresa de carácter de economía mixta, no era necesaria, lo que se buscaba era abrir las puertas para su privatización.
Como Colectivo Sindical le exigimos al gobierno que le hable con claridad a los colombianos, “las implicaciones de esa privatización, que van desde tener que incrementar de manera exagerada el precio de los combustibles, para pagarle a ECOPETROL S.A. (y sus nuevos propietarios) los precios internacionales, sin que la empresa asuma ningún aporte o subsidio como lo hacía, trayendo como consecuencia que hoy estemos pagando los combustibles más costosos que en los EEUU”.
De otra parte, no se ha dicho cuánto dinero ha dejado de recibir la nación, producto de la distribución de utilidades con sus nuevos socios, que dicho sea de paso, mayoritariamente son los grandes fondos privados cuyos propietarios son las entidades financieras, y no, gran cantidad de ciudadanos colombianos del común como se ha pretendido hacer creer. Las utilidades operacionales reportadas por Ecopetrol en el 2008 fueron de $12.6 billones, en el 2009 fueron de más de $8 billones de pesos, y se anuncia que para el 2010 serán de más de $11.9 billones. Cuanto de este recurso se quedo en los bolsillos de los socios de Ecopetrol. Esto es una burda maniobra, donde las ganancias quedan en pocas manos y no en la gran mayoría de los colombianos.
El gobierno actual con Santos a la cabeza, continua con la política de su antecesor decide salir de buena parte de su participación en ECOPETROL S.A., para tratar de hacer las inversiones en infraestructura con la venta de la empresa estatal mas rentable en Colombia y no cambiar su enfoque económico del pago cumplido de los intereses de la deuda externa, el gasto militar, eliminar la gran cantidad de exenciones tributarias que tienen las multinacionales y que llegan casi a los 7 billones de pesos, utilizar las reservas que se tienen en el FAEP, entre otros.
Lo que denunciamos como Colectivo Sindical y las propuestas que hacemos sabemos que solo se sacan adelante si nos movilizamos, si logramos hacer entender comprender de la necesidad de defender el patrimonio público y las empresas estatales estratégicas del Estado colombiano. Debemos de rechazar organizadamente la decisión del gobierno de Santos de vender el 10% adicional de las acciones de ECOPETROL, que va en detrimento de los intereses de la nación y a favor del capital internacional.
Por eso defender ECOPETROL, es defender la soberanía nacional, con la movilización logramos no solo detener esta medida del gobierno sino exigir que ECOPETROL vuelva a ser el 100% estatal.
2. El salario mínimo para el 2011.
Otro golpe para los colombianos, para el movimiento sindical y la clase trabajadora en particular es el Decreto unilateral del “incremento” del salario mínimo del año 2011, el cual es un llamado de alerta para y se suma a las medidas hoy Leyes de la República que repercuten negativamente sobre las grandes mayorías por su impacto social y laboral como la Reforma a la salud, la Ley de víctimas, Las medidas de emergencia social y económica por las consecuencias del invierno, la Ley de regalías (con su efecto sobre las finanzas de los departamentos), entre otros.
El “aumento” rige dese el primero de enero de 2011, el salario mínimo mensual quedará en $532.500, más un subsidio de transporte de $63.600.
El “incremento” del 3,4% es equivalente a $17.500, ya que el salario mínimo vigente en el año 2010 fue de $515.000. Adicionalmente, el subsidio de transporte se sumará $2.100 a los $61.500 que se pagan en la actualidad.
Las centrales obreras pidieron hoy al gobierno del presidente Juan Manuel Santos revisar el monto del salario mínimo decretado para este nuevo año, teniendo en cuenta el índice de inflación que reportó el DANE. Lo anterior para tratar de compensar el alza de la canasta familiar que actualmente está disparado.
El 3.4. del SMLV para el año 2011 quedó en nada con la inflación que llegó a 3.17%, que está muy por fuera de los cáculos que tenía el gobierno del 2.7 %.
Las implicaciones reales y prácticas del SLMLV del año 2011 son muy tristes, poco halagüeñas como quiera que este es el indicador de la remuneración o pago del trabajo de nuestra gente, de la fuerza de trabajo, y con él la capacidad de compra de los trabajadores asalariados de los bienes y servicios para satisfacer sus necesidades básicas y alcanzar sus aspiraciones. Alimentación, vivienda, ropa, servicios públicos, educación, salud, saneamiento básico, agua potable y la recreación y el descanso. Todo eso son ilusiones, pues, con este salario abundará la escasez y se profundizarán las carencias y necesidades del pueblo colombiano.
Como Colectivo Sindical denunciamos este 3.4% que el gobierno impone a los trabajadores del país que devengan el Salario Mínimo, así como la imposición que se hace a los trabajadores y trabajadoras estatales en donde se impone entre 2.1 y el 2.5 %. Esto no alcanza para cubrir las necesidades básicas de una familia colombiana.
El gobierno de la “prosperidad democrática” no para el desempleo que va en aumento, no para el subempleo y está incentivando la tercerización laboral, con su Ley de Formalización Laboral y Primer Empleo, en cuyo contenido vemos claro que lo único que se busca es reforzar las inmejorables condiciones que tienen los verdaderos dueños del país para seguir acumulando capital. Si favorecer a los grandes empresarios y las multinacionales es su propósito central.
Aumenta la gasolina, las tarifas de servicios públicos, los arrendamientos, los peajes, el transporte, la canasta familiar por encima del 5%, el poder adquisitivo de los trabajadores es día a día peor.
Como Colectivo sindical trabajaremos para que las direcciones sindicales reclamen ante los patronos y los gobiernos el derecho al trabajo digno y justamente remunerado, denunciar e impedir la tercerización laboral. Debemos de levantar nuevamente la bandera por el respeto a la estabilidad laboral y las conquistas laborales de los trabajadores. Luchar por el incremento de los salarios y por el pleno empleo con estabilidad, salarios, pensiones y condiciones laborales dignas.
Exigiremos medidas de fondo como la congelación de los elementos que más inciden en la canasta familiar, como las tarifas de los servicios públicos y el transporte, entre otros.
Es claro para nosotros que los espacios de concertación donde se participe por parte de los trabajadores con el gobierno sino se acompañan con acciones organizadas de masas, es decir, con la movilización beligerante de los trabajadores en calles y empresas, la concertación no pasará de ser más que un embeleco y conllevan al inmovilismo de las masas y en particular de los trabajadores.
3. La crisis económica se profundiza: invierno.
El fenómeno del invierno –La niña- agrava o profundiza la crisis económica en nuestro país. Las luchas que libra nuestro pueblo por transformaciones sociales, democráticas y progresistas, adquieren hoy, nuevos niveles de confrontación no solo contra el imperialismo sino contra los gobiernos lacayos como el de Colombia. Aparece un nuevo campo de lucha por la preservación de la naturaleza, de la vida misma en el planeta, es un nuevo factor de confrontación entre la clase trabajadora y el pueblo en general contra el gobierno y el imperialismo.
Las grandes cumbres internacionales por la salvación del planeta son cantos a la bandera y en nada quedan. La gran industria militar, química, entre otros siguen envenenando y deteriorando en gran medida el medio ambiente: mares, ríos, atmosfera, la despensa alimentaria, con enormes amenazas para la humanidad. Nosotros debemos de detener tal agresión a la vida del hombre y de la naturaleza.
Este invierno, es la consecuencia del deterioro cada vez mayor del ecosistema en el ámbito mundial, Colombia no es la excepción.
Como Colectivo sindical llamamos a que se le dé a esta problemática una mirada holística y los invitamos a que juntos avancemos en esta seria reflexión en torno al análisis y las salidas:
Este fenómeno agrava y profundiza la crisis económica a nivel mundial y en nuestro país.
Hay efectos del calentamiento global. Papel del imperialismo en el deterioro del planeta del ecosistema.
El Estado no tiene la capacidad de enfrentar esta problemática. Todo está en manos de particulares. Hoy no se puede hacer nada de inmediato porque todo esta privatizado.
Esto no se resuelve con impuestos nuevos ni con teletones. Hoy está destruida la infraestructura vial del país, grandes hectáreas de tierras, viviendas, hospitales, escuelas etc.
Viene la carestía, la hambruna, enfermedades, mas pobreza e indigencia, mas desempleo y menos condiciones y garantías laborales para la clase trabajadora y el pueblo en general. Este invierno no afecta solo a los que directamente toca sino a toda la nación: esto nos toca a todos.
Cerca de 5 diques se los llevó la corriente de los ríos.
SALIDAS:
Exigir que el Estado retome la responsabilidad inmediata en el manejo de los servicios públicos y la infraestructura del país.
Esto no se resuelve con impuestos nuevos ni con teletones, ni con una política asistencialista.
Hoy, hay que cambiar la prioridad del país en lo económico y lo político. El no pago de la deuda externa que implica entre otras, la suspensión inmediata de la deuda externa y/o que le condonen la deuda.
Exigir un cambio en el presupuesto nacional.
Que el alto presupuesto para la guerra se destine para los afectados por el invierno.
Al pueblo trabajador no se le debe reducir los ingresos, lo que hay que garantizarle es lo que tienen y avanzar con los que no lo tienen.
Plan de vivienda y reubicación de la gente damnificada directamente. Planes de vivienda populares financiados por el Estado. Un Plan de ordenamiento Territorial que garantice la vivienda digna, servicios públicos bajo la responsabilidad del Estado.
Eje central del Plan de gobierno sean: la reconstrucción y empleo de nuestra gente.
Rechazar las medidas de emergencia económica tomadas por el gobierno de Santos que van en dirección de que sea el pueblo quien asuma los costos.
COLECTIVO NACIONAL SINDICAL CLASISTA “GUILLERMO MARÍN”
DIRECCION NACIONAL
Bogotá, enero 7 de 2010.